Alguien me hizo llegar un mail que dice "Las 14 balas fueron para vos". Se refiere a los balazos que impactaron en la fachada de la vivienda del gobernador de la provincia. Ese alguien tal vez sea uno de los tantos JTP (la sigla viene de Jefe de Trabajos Prácticos, refiriéndome con ella a personal docente de universidad de rango inicial) de la agrupación universitaria del partido de gobierno de mi provincia. Nunca como en estos tiempos se había visto que alguien, por el sólo hecho de ser JTP o ayudante de cátedra y militar en aquella agrupación estudiantil pudiera aspirar a cargos de Director o, incluso, Subsecretario en mi provincia.
Éste podría catalogarse como un gobierno provincial de JTP. Y esto se debe no sólo a la escasez de militancia sino a la brutal inflación de cargos políticos provinciales producidos por la gestión que se inició en diciembre de 2007 que hacen de deban echar mano de todo aquel que puedan.
Volvamos a los disparos. Todo parece indicar que provienen de bandas narcos aunque, dada la escasa voluntad de persecución que han mostrado, cuando no la protección brindada a jefes policiales en connivencia con los cárteles y a los jefes de éstos, sería más lógico que los disparos hubieran buscado al fiscal federal.
Y no me cabe la menor duda de que, si los disparos hubieran estado dirigidos contra alguien del gobierno nacional Binner, o cualquiera de sus chirolitas, hubieran empezado a hablar al instante de autoatentado ...
Por ejemplo, es muy sintomática la protección que le brinda el ex gobernador Binner (referente supremo del partido de gobierno) a su ex jefe de drogas peligrosas Tognoli, quien logró el récord de procedimientos antidrogas de "1 porro" mientras los 'kioskos' de la droga proliferaron hasta niveles insospechados en la ciudad de Rosario. Claro, algunos hasta con policías que les brindaban seguridad. En reconocimiento a su brillante gestión, el gobernador hoy agredido a balazos lo elevó a jefe de policía de la provincia, con lo que su labor de protección se magnificó. A quienes protegía Tognoli, vaya a saber.
Durante la brillante gestión como jefe de drogas peligrosas de Tognoli (2007/2011) se produjo el pasmoso ascenso del imperio de El rey de la efedrina, mozo de café rosarino poseedor de automóviles Rolls Royce (y de los más caros del listado) y de una mansión digna de telenovela colombiana. Y el jefe provincial de drogas peligrosas ni se enteró. Todo salió a la luz por una investigación nacional.
Un hecho interesante que me sucedió a mí en persona en enero de 2008 cuando en atención a un proyecto en el cual me desempeñaba tuve que visitar (acompañado por dos funcionarios políticos de aquel entonces, de iniciales MM y GA) al entonces logístico del Ministerio de Seguridad. Al llegar, el grasiento y desagradable sujeto me dijo que me conocía aunque no recordaba de dónde. Yo luego creí reconocer en él el rostro de pájaro de uno de los integrantes de la patota paramilitar que secuestró a mi hermana en 1977 (si leen lo que he publicado al respecto es el sujeto que portaba una ametralladora Pam y que se quedó en el living de casa). Casualmente, luego supe que este sujeto se vanagloriaba de haber desaparecido gente durante la represión. Había sido policía de inteligencia (D2) en aquellos años, luego se había recibido de Contador. Empezaba a encajar todo. Lo de que me conocía pudo haber sido una amenaza velada hacia mí persona.
Volviendo al tema de hoy, este tipo (quien manejó de facto a la policía provincial) nos dijo que un importante jurista de proyección nacional e internacional (tal vez el único rescatable de una Corte Suprema de Justicia avergonzante) les había recomendado que les dejen a la policía "cajas" para que recauden y que "no moleste". Esas cajas eran las de la prostitución, el juego clandestino y, cha chán, cha chán ... la droga. Esto significa que, ni más ni menos, la connivencia con los narcos fue estructurada desde el primer momento del gobierno del signo de la gestión actual. Personalmente dudo de que aquel renombrado jurista les haya dicho tal cosa. Tampoco creo que este procedimiento de las "cajas", que deriva en el nefasto autogobierno policial haya comenzado con la gestión Binner (el gordo aquel era también quien manejaba la policía con Reutemann).
Espero que no sea éste el último artículo que escribo.
Lo que sí es cierto es que las catorce balas sí, verdaderamente, están dirigidas a mí. O lo estarán. Y fundamentalmente por la incompetencia de este partido de gobierno.
Esteban Cámara
Santa Fe, 13/10/2013
Este partido se hace llamar "socialista". La memoria de Allende me impide suscribir aquella ofensa.
ResponderEliminar