viernes, 27 de septiembre de 2013

CUBA: Los CDR

"Que en el barrio vean al Comité de Defensa, todos los ciudadanos, como una organización que es amiga, como una organización revolucionaria, como una organización que está dispuesta a ayudar: aunque esta dispuesta a actuar con toda energía que sea necesaria cuando se lo ordena la Revolución" ” Fidel, 28/9/61. Primer Aniversario de los CDR)

Hoy se inicia en La Habana el VIII Congreso de los Comité de Defensa de la Revolución (CDR), "un encuentro para mirar por dentro la organización más numerosa del país y para caminar en pos de los nuevos tiempos…"


Historia de los CDR

Los primeros años de la Revolución Cubana fueron pletóricos de atentados y asesinatos por parte de los contrarrevolucionarios armados y financiados por los EEUU. 

"Casi un millón de personas, congregadas frente al antiguo Palacio Presidencial (hoy Museo de la Revolución), escuchaban al entonces primer ministro Fidel Castro Ruz en la noche del 28 de septiembre de 1960 cuando se oyeron varias explosiones. Entonces, los allí reunidos respondieron con vivas a la Revolución, a su líder y entonaron las notas del Himno Nacional." (Ecured).

"Vamos a establecer un sistema de vigilancia revolucionaria colectiva" - apuntó Fidel Castro en esa ocasión - "Están jugando con el pueblo y no saben todavía quién es el pueblo; están jugando con el pueblo y no saben la tremenda fuerza revolucionaria que hay en el pueblo" (Ecured).

Organización

En la actualidad, esa colectividad reúne en sus 133 000 núcleos a casi ocho millones de ciudadanos cubanos mayores de 14 años de edad, sin distinguir sexo, raza o religión .

Distribución territorial

En cada cuadra de todo rincón de Cuba hay un CDR, luego éstos se agrupan por zonas, Municipios, Provincias y, finalmente, en la coordinación nacional. 

Misión

Tienen por misión defender los logros de la revolución, prevenir el terrorismo, crear y difundir la formación ideológica revolucionaria, detectar necesidades, promover el reciclaje de recursos y colaborar en la aplicación de acciones de defensa civil (preparación de la población frente a huracanes y otras catástrofes) y de programas sociales, de salud y otros establecidos por el gobierno (adultos mayores, niñez, médico de familia, donaciones de sangre, etc.). Fueron fundamentales en las campañas de alfabetización de los primeros tiempos de la revolución, en donde Cuba pasó de un 40% de analfabetismo a prácticamente 0. También en campañas de vacunación y en la organización de movilizaciones como las que exigió y logró el regreso del niño secuestrado en EEUU Elián González y, actualmente, las que piden la liberación de los cinco héroes antiterroristas injustamente encarcelados en USA. Por su parte, junto con el jefe de manzana de seguridad, participan de uno de los logros principales de la revolución, cual es su excelencia en seguridad pública.

"A ellos les corresponde el honor de haber asumido otras tareas para convertirse en lo que son hoy: la organización más masiva de la sociedad cubana, eje de solidaridad, cooperación y ayuda mutua entre vecinos" (Ecured).

Los CDR están conformados por ciudadanos ad-honorem: MILITANTES (quienes, lejos de beneficiarse, muchas veces hasta solventan de su bolsillo los gastos relacionados a sus actividades). Además, son el ámbito de inicio de las postulaciones de ciudadanos aspirantes a funcionarios de gobierno que luego se someten al veredicto de las urnas para acceder a las instancias de decisión.


Canción

De cara a cara con el porvenir,qué meta puede hablar,
si no es la meta de vencer o morir.

En cada cuadra un comité,en cada barrio revolución,
cuadra por barrio, barrio por pueblo,
país en lucha: revolución.
Desde las cuadras crece mi país,
se desarrolla y se proyecta así,
qué importa el reto, la respuesta es:
en cada cuadra un comité,
en cada barrio revolución,
cuadra por barrio, barrio por pueblo,
país en lucha: revolución.

Desde que el sol rompió su molde,y el enemigo su consuelo,
ya desde entonces la respuesta fue:
en cada cuadra un comité,
en cada barrio revolución,
cuadra por barrio, barrio por pueblo,
país en lucha: revolución.
Desde la sierra a la ciudad,
tanto en el monte como en el mar,
cuadra por barrio, barrio por pueblo
a la vanguardia va el Comité.


Mitzberg, un investigador de la organización empresaria, decía que la Unión Soviética había fracasado porque no había logrado la adhesión profunda de la ciudadanía a la revolución. Tal vez el elemento distinto, la razón de la prodigiosa perdurabilidad del socialismo cubano sean el funcionamiento de los CDR.

Como experto en políticas públicas no puedo menos que valorar este increíble mecanismo de cercanía del estado con el pueblo del que yo tenga conocimiento a nivel global.

Conozco la labor de los CDR, brazo del partido, del estado y de la revolución presentes en cada cuadra de toda Cuba y ejemplo transparente e imbatible de inmediatez estado - sociedad.




Fuente: Ecured y observaciones de mi viaje a Cuba de abril y mayo de 2013.


Esteban Cámara

jueves, 26 de septiembre de 2013

¿Sólo un mal sueño?

Cuando todavía no había finalizado el rescate de los 33 mineros chilenos atrapados 70 días por un derrumbe en la mina San José, Copiapó, norte de Chile, en octubre de 2010, me desperté con un mal sabor en el alma. Había tenido una extraña pesadilla.

Al derrumbe lo había causado la geología, pero a las condiciones inseguras e inhumanas de la mina las causaron la codicia empresaria, el afán de obtener ganancias antes de cualquier valor, el neoliberalismo y el capitalismo. 

Mi sueño se lo debo al asco que me dió el regodeo y vedettismo de Piñera y otros negreros, actuando como si el fuera el salvador de los trabajadores cuando sabemos que es todo lo contrario...

Los rescatistas, una vez salido el último minero, se rebelaban y se negaban a salir del pozo en protesta por las malas condiciones de trabajo y la explotación de los mineros y de los trabajadores chilenos en general y por el genocidio que sufre, entre otros, el pueblo mapuche.

Entonces, Piñera-chet armaba un grupo de tareas compuesto por ex agentes de la Dina de Pinochet, ex guardias de los campos de concentración de los estadios Chile y Nacional (incluso el que le cortó las manos al querido músico Víctor Jara) y personal de la FACH que colaboró personalmente y muy a gusto con los ingleses durante la guerra de las Malvinas. 

El grupo de tareas tomaba el pozo con "máximo perjuicio", asesinando hasta al último rescatista entre los vítores de los empresarios, de los periodistas de El Mercurio y otros similares, de los representantes de los países del primer mundo y de los funcionarios del gobierno nacional chileno.

Apenas me desperté supe que era un sueño: las contradicciones ideológicas y de clase rara vez se expresan tan claramente.



Esteban Cámara

Octubre de 2010

martes, 24 de septiembre de 2013

De cipayos e imperialismo

"...nosotros confiamos totalmente en Cristina Fernández de Kirchner, y si Cristina Fernández de Kirchner hubiera sido presidenta de Ecuador en la época en que Texaco destruyó la selva ecuatoriana, eso jamás lo hubiera permitido. Por eso todo nuestro apoyo al gobierno de Cristina”. Rafael Correa, presidente de Ecuador, 18 de septiembre de 2013, nota en Página 12.Muchas voces de ... ¿izquierda? se alzaron contra la decisión del gobierno argentino de explotar en forma conjunta con Chevron el yacimiento de petróleo y gas NO CONVENCIONAL, de Vaca Muerta. "Entrega del patrimonio nacional", denunciaron. "Miren lo que hicieron en Ecuador", argumentaron.

A ver, antes de seguir les explico lo que significa "yacimiento no convencional": Es cuando el combustible gaseoso o líquido se encuentran enquistados en roca, no formando una bolsa o lago. Para extraerlos es preciso usar tecnologías complejas, que no están al alcance de cualquiera. Una de éstas tecnologías es el fracking y la puede usar Chevron. Chevron va a invertir en ésto 1.400 millones de dólares. Sin dominar alguna de estas tecnologías de última generación y difícil acceso, es imposible extraer combustibles de ese tipo de yacimientos. Se diría que podríamos intentarlo pero probablemente el costo medioambiental sería desastroso. Y allí estarían de nuevo los catilinarios levantando sus deditos admonitorios...

Ah, en Ecuador el daño a la selva la realizó Texaco, no Chevron. El litigio del estado ecuatoriano con Chevron es porque ésta compró a Texaco.

El problema no es a quién se le abre la puerta, sino las normas que les ponemos y les hacemos cumplir, efectivamente. El imperialismo siempre va a ser imperialismo, siempre se va a querer meter a hacer de las suyas, siguiendo sólo su ley, que es la ley del egoísmo, de la maximización de la ganancia propia. El asunto es que quien ponga las normas seamos nosotros. Cuando perdimos los ferrocarriles en la década del '90, gobierno cipayo como el que más, ése gobierno fue reelecto por el pueblo argentino. Entonces, no le echemos la culpa de todo a los extranjeros. A los ferrocarriles, al subsuelo, y a tantas otras cosas los perdimos entre todos. No acusemos al imperialismo invisibilizando de nuestros errores como sociedad. Los políticos cipayos tampoco bajan de una nave intergaláctica, surgen del seno mismo de nuestra sociedad y llegan a instancias de poder gracias al voto de la gente.

El problema mayor no es el imperialismo, sino los cipayos, los que entregan las riquezas permitiendo la maximización de ganancias de las multinacionales, la no reinversión local de las utilidades y los daños medioambientales y sociales. De no aliarnos con alguna multinacional el petróleo y el gas de vaca muerta permanecerían allí. Y nuevamente, Catilina nos abrumaría a reproches.



Esteban Cámara

domingo, 22 de septiembre de 2013

El viejo yacaré

El yacaré (Caimán yacaré), es un reptil sudamericano del orden Crocodilia, familia Alligatoridae, que alcanza 2.50 metros de longitud, también llamado caimán hocico angosto, caimán cascarudo, yacaré gargantilla, yacaré-hú (en lengua guaraní), niagariack (pilagá), ananok (mocoví) y laedock (toba). Habita las áreas de esteros desde el centro de Sudamérica hacia el sur, llegando hasta las provincias argentinas de Santa Fe y Entre Ríos.


Nadie tiene ni la más puta idea de cuándo nació aquel animal. Algún viejo desdentado anda diciendo que su abuelo le contaba que, siendo niño, el yacaré era cachorro y a veces lo veía en la margen desierta del riacho. Cuenta la leyenda de la zona que de joven el yacaré era peligroso y se había masticado a algunos cazadores furtivos y a algún delincuente que se quiso refugiar en los intrincados canales de nuestro ancho y caudaloso río de llanura. Parece incluso que fue el causante de que cierto policía con fama de malo que se aventuró por el paraje jamás volviera a torturar a los detenidos. Otros dicen que esto es puro cuento, que el animal se alimenta sólo de pirañas y otros peces, sin hacerle asco a nutrias, ratas y carpinchos que se le pongan a tiro. Pero que nunca mató a un humano.


Lo cierto es que no hay nombres de víctimas y esto parece darles la razón a estos últimos.

El yacaré hace muchos años se hacía ver por la gente de las islas, asoleaba su lomo en las márgenes más solitarias de canales y riachos en las siestas de invierno. Hasta se organizaron partidas de caza pero nunca lo encontraron, siquiera. Luego de éstas se fue haciendo cada vez más infrecuente avistarlo. Y cuando lo veían era cada vez más lejos del poblado, cada vez más en las islas más distantes, las del centro de los bajos, en los esteros de más al norte. Pero esos parajes tienen una fama negra, de asesinatos y espectros aterradores y son pocos los que quieren aventurarse por allí.

Hace décadas que nadie lo ha visto claramente, pero varios aventurados refieren haber visto un negro y escamoso gran lomo en alguna ribera lejana. Es hoy una bestia enorme, sabido es que los reptiles no dejan de crecer y a éste en particular se lo supone más que centenario.

Es en el pago una leyenda que causa temor y reverencia. Se lo cree mágico y algunos piensan que avistarlo da buena suerte. Otros muchos le temen, lo suponen hambriento de carne humana.

Sólo yo sé la verdad. El yacaré supo ser humano, un humano solitario, rebelde y tozudo, amante de la libertad y enemigo de la injusticia. Creció sintiéndose diferente de sus coetáneos, un poco al margen. Sociofóbico y distante, no todos apreciaban su parquedad y su simple dureza. 

Le encantaba ir desde niño a la isla, a pescar y nadar, sólo o acompañado. Odiaba las armas que algunos querían llevar y de alguna manera logró prohibirlas, al menos para los que fueran con él. Decía que les tenía asco, pero yo sospecho que en él, como siempre, el asco es el nombre de pila del miedo.

Con el tiempo, este hombre vio morir a sus padres, hermanos y amigos de la infancia. Envejecía lento, lento, tanto que vio arrugarse a hijos y sobrinos. Fue entonces que se refugió permanentemente en la isla: Sabía que ya poco podría proteger a sus familiares y no quería apenarlos con el espectáculo de su muerte. 

Pero el hombre, a quien le encantaba comer pescado, nadar, el agua, el río y la isla, poco a poco se fue volviendo más oscuro y su piel se tornó insólitamente gruesa y escamosa. Y cada vez se iba mudando más lejos de las otras casas y su rancho fue haciéndose más simple hasta convertirse en un tosco emparrado de ramas y hojas secas.

El último que supo de él fue un sobrino, ya anciano, que lo buscó durante meses en el laberinto de islas. Cuando lo avistó le dijo que lo visitaba para decirle que se iba del pago Y como integrante mayor de la familia, sentía el deber de avisarle que ya no quedaba nadie de su sangre. 

Ahí cortó por completo los lazos con lo humano y se fue quedando cada vez más tiempo en el agua. De a poco le fue creciendo una cola enorme y sus manos y pies se convirtieron en garras. La boca se le fue alargando, se volvió un hocico aterrorizador repleto de dientes. Por último, un párpado extra le creció en los ojos, tal vez para protegerlo en sus inmersiones que se hicieron cada vez más prolongadas y frecuentes. Pero lo único que le preocupó fue que la piel escamosa se le hizo cada vez más y más gruesa.


Digan lo que digan yo sé que vive, todavía, en una isla del centro del estero más lejano.





Esteban Cámara
Santa Fe, septiembre de 2013

sábado, 21 de septiembre de 2013

Presupuesto

En estos días de debate parlamentario sobre el particular, creo que vale este artículo escrito en el año 2010 (2011 fue "el año que vivimos sin presupuesto").
Nota original publicada en Facebook el 15/11/2010:

El presupuesto se define como la expresión financiera de la planificación tanto de empresas como de gobiernos, ong’s, etc. Contiene la estimación de ingresos (recursos) y egresos (erogaciones) monetarios y es lo que da factibilidad de financiaciòn a los programas, actividades y políticas que se piensan llevar adelante.


Dado su carácter estimativo siempre se puede verificar algún desfasaje con lo que la realidad depare en el período siguiente. Para solucionar esto están las modificaciones presupuestarias.

Entrando ahora en la esfera pública o de gobierno:

Dentro de los Recursos (ingresos) los tres grandes grupos son los Recursos corrientes (recaudación de impuestos, tasas, cánones, derechos aduaneros, etc.) , los Recursos de capital (casi inexistentes en el sector público porque el estado no suele vender bienes de capital) y el Financiamiento (diferente tipo de préstamos y subsidios reintegrables).

Respecto de las Erogaciones (egresos, gastos o inversiones) existen también tres grandes grupos: las Erogaciones corrientes (genéricamente consideradas “gasto” para diferenciarlas de las inversiones en bienes de capital, aunque muchas pueden considerarse inversiones) que incluyen sueldos, compras de bienes de uso (consumibles que se agotan en un período igual o inferior al año), pago de servicios de terceros, etc., las Erogaciones de capital (inversiones en bienes de capital –inmuebles o vehículos, por ejemplo- o activos financieros que incrementan el capital) y las Transferencias (recursos que se destinan directamente a otras personas físicas o jurídicas).

A su vez, dentro de estos grupos presupuestarias existe una división en cuentas y subcuentas de destino específico con gran nivel de detalle.


En los modernos sistemas de administración estatal no se permite realizar ningún gasto que no estuviera presupuestado. Los ingresos que no hubieran estado previstos deben ingresar en el presupuesto a través de una modificación que, en el caso del gobierno nacional argentino debe ser aprobada en el parlamento y esa modificación indica la cuenta específica en donde se debe erogar ese recurso.

Está claro que ningún estado sobrevive sin contar con un presupuesto. Afortunadamente el orden jurídico previó situaciones de emergencia o negligencia extremas como la de 2010 por lo que, en caso de iniciarse un período sin aprobación del presupuesto respectivo, rige el presupuesto del período anterior.


El actual debate (se refiere a la acción obstructiva de la oposición parlamentaria al gobierno en 2010, surgida de la derrota electoral del año anterior) argentino respecto de no aprobar el presupuesto indica un nivel inédito de canibalización por parte de la oposición. Como ya lo señaló el diputado Agustín Rossi, parecieran haberse resignado a no ganar las elecciones 2011, al menos por las vías normales.

Pareciera que la oposición a la actual gestión de gobierno busca que la Argentina llegue al caos social tal vez como única esperanza de arribar al poder. O, al menos, teniendo en cuenta lo expresado hace pocos párrafos respecto de la vigencia del presupuesto anterior, trata de que el gobierno no ponga en marcha nuevas políticas, a sabiendas de que cada nueva acción lo acerca miles y miles de votos a la reelección en la misma medida en que a ellos, la oposición, los aleja.

Fin del artículo original

Espero que de las elecciones de octubre de este 2013 no resulte una composición parlamentaria suicida como la que actuó en 2010.




Esteban Cámara

viernes, 20 de septiembre de 2013

Hammerstein

En estos días estoy bloqueado para la escritura, se habrán dado cuenta. Por eso reproduzco para ustedes artículos ajenos, al menos para que sepan que aún estoy. 

Este artículo de Juan Forn en Página 12 me parece muy valioso, porque habla de uno de esos estrategas de la acción silente. Los que a mí me gustan, los que no hacen grandes discursos: Piensan y actúan. Brindo por ellos. Nada más asqueroso para mí sensibilidad que los que hacen lo opuesto. Hablan, hablan y hablan pero no hacen: Parásitos. O actúan sin pensar: Peligrosos.

Me sedujo ya de por sí esta clasificación de los oficiales del ejército, original, compleja y subversiva: “Hay cuatro clases de oficiales: los inteligentes, los trabajadores, los vagos y los tontos. En la mayoría de los casos, las cualidades concurren de a dos. Los que son vagos y tontos conforman el 90 por ciento de la oficialidad. Los inteligentes que son trabajadores hay que mandarlos al Estado Mayor. El inteligente que es vago califica para las más altas tareas de mando porque sabe delegar y tiene el aplomo y la claridad mental necesarios para tomar decisiones de peso. Y del tonto y trabajador hay que protegerse y nunca delegarle ninguna responsabilidad porque siempre causará alguna desgracia”. Creo que esta clasificación es aplicable para cualquier persona que labore (trabajadores, militantes, investigadores). Al leerla me sublevó un poco la denostación de los 'tontos-trabajadores', pero al poco tiempo la ligué con una definición de Heidegger "La ciencia no piensa" y me dí cuenta de que esos tontos-trabajadores son los idiotas útiles que pueden trabajar para lo 'blanco' y para lo 'negro' indistintamente, acríticos. Realmente, son nocivos.

El autor de aquella frase se llamó Kurt von Hammerstein-Equord, nació el 26 de septiembre de 1878 en Woldegk, Mecklenburg y falleció el 25 de abril de 1943, en Berlin. Fue un acérrimo opositor a Hitler, siendo General en Jefe del ejército alemán le suplicó a Hindemburg (tal vez sea esta mente esclerosada el mejor ejemplo de cómo el institucionalismo burgués termina alfombrándole el camino al fascismo) que detuviera a Hitler. Doblemente condecorado con la Cruz de Hierro, le decían el general rojo. Sus hijos fueron de la resistencia antinazi. 

"En el despacho de Lord Latimer, en el alto mando británico, durante la Segunda Guerra, había un cuadrito que decía: “Hay cuatro clases de oficiales: los inteligentes, los trabajadores, los vagos y los tontos. En la mayoría de los casos, las cualidades concurren de a dos. Los que son vagos y tontos conforman el 90 por ciento de la oficialidad. Los inteligentes que son trabajadores hay que mandarlos al Estado Mayor. El inteligente que es vago califica para las más altas tareas de mando porque sabe delegar y tiene el aplomo y la claridad mental necesarios para tomar decisiones de peso. Y del tonto y trabajador hay que protegerse y nunca delegarle ninguna responsabilidad porque siempre causará alguna desgracia”. Lo curioso es que la frase era de un general del ejército alemán, un general que seguía vivo y que, en los papeles al menos, aún pertenecía al ejército de Hitler, aunque pasado a retiro. Su nombre era Hammerstein, desde que en 1933 eliminó la partícula “von” de su apellido, junto con el título de barón que la antecedía. Dejó de tener trato con sus colegas de la nobleza el día que pidió la baja, y pidió la baja el día que Hindenburg nombró al cabo austríaco (así llamaba Hammerstein a Hitler) canciller de la nación.

En el Ministerio de Defensa eran legendarias su inteligencia y su vagancia. Lo llamaban El Hombre Invisible, porque había sido el responsable de las relaciones entre el ejército alemán y el Ejército Rojo desde 1921 hasta 1932, unas relaciones tan clandestinas como fructíferas para ambas partes: el Tratado de Versalles posterior a la derrota en la Primera Guerra le prohibía a Alemania producir artillería pesada. Los rusos fabricaban tanques de sobra, pero necesitaban expertos que profesionalizaran su ejército. Como dijo el mariscal Tujachewski años después: “El ejército alemán fue el maestro del Ejército Rojo. No olviden que es la política la que nos separa, no nuestros sentimientos”. Vale la pena recordar que el viaje de Lenin en el tren blindado en 1917 había sido solventado por el ejército imperial alemán, para debilitar a Rusia. Vale la pena mencionar también que esos mismos militares alemanes que quince años después tenían tan buena relación con sus pares soviéticos, volvían a sus casas y creían completamente lógico que en territorio alemán se exterminara a los comunistas, y para fines de 1932 eran unos cuantos los que veían en Hitler la herramienta ideal para hacerlo. Hammerstein, en cambio, había sostenido ante Hindenburg mismo que el ejército aún podía desactivar a Hitler y desbandar sus huestes. Hindenburg le ordenó en cambio que sentara a los generales a escuchar al cabo austríaco. Hammerstein tuvo que hacerlo en su casa (la casa que le daba el ejército como comandante del Estado Mayor en Berlín). Hitler relató famosamente sus planes en esa reunión (“Cinco años para exterminar el enemigo interior y luego la conquista del mundo”).

En 1938, cuando el final de esos cinco años se acercaba, y fueron imprescindibles las mejores cabezas estratégicas del ejército para la etapa siguiente del plan, alguien en el alto mando logró que se le ofreciera al retirado Hammerstein la comandancia de los Sudetes. Hitler iba a sentarse en esos días en Munich con el inglés Chamberlain y el francés Daladier: o le permitían quedarse con los territorios ocupados hasta entonces o sería la guerra. Alguien en el alto mando sugirió que una aparición pública del Führer en el frente de los Sudetes sería un buen golpe de efecto. En realidad era una conspiración, planeada en el mayor de los secretos: Hammerstein arrestaría a Hitler en cuanto bajara del avión y los generales tomarían el poder y frenarían la guerra. Pero Hitler, a último momento, decidió no ir: Daladier y Chamberlain le habían firmado con pulso tembloroso todo lo que pedía, Europa había ganado un año de clemencia. Hasta el final de sus días lamentó Hitler no haber empezado la guerra en 1938. Hasta el final de sus días lamentó Hammerstein aquella última oportunidad perdida por Alemania para desactivar al demonio.

Desde que fue relevado de su puesto y pasado a retiro efectivo días después de la firma del Tratado de Munich, en 1938, hasta que murió de un infarto en 1943, Hammerstein vivió de espaldas al nazismo. Cada vez que lo tanteaban los conspiradores, él contestaba: “Si alguien matara a Hitler antes de que el último alemán vea el abismo en que hemos caído por culpa de él, lo beneficiaríamos, lo haríamos un mártir”. A Ruth von Mayerburg, la condesa que era espía de los soviéticos y después escribió unas memorias de título formidable (Sangre azul, bandera roja), le dijo, cuando ella lo acusó de desentenderse del mundo: “Hago lo único sensato que puede hacer un caballero. No soy un héroe, no me abro paso a codazos en la rueda de la historia como ustedes”. Estaban en una partida de caza a la que ella había logrado que fuera: Hammerstein ya no tenía coto propio, no tenía nada, no veía a nadie, a duras penas mantenía a su mujer y a sus siete hijos con la pensión que le daba el ejército, pero siguió indolente, desesperantemente fiel a su papel hasta el final (la condesa estaba allí para ofrecerle, en nombre del mariscal Voroshilov, asilo en la URSS, con coto de caza propio, si colaboraba en la estrategia del Ejército Rojo).

Los hijos de Hammerstein nunca oyeron a su padre hablar en la mesa, salvo cuando había visitas. Tampoco lograron que les preguntara nunca por sus maestros o sus compañeros. Hammerstein no hablaba con ellos; sólo les dedicaba de tanto en tanto brevísimas y fulminantes enseñanzas en forma de comentarios al pasar (“El miedo no es una visión del mundo”). Sin embargo, los dejó estudiar, los dejó ir en la dirección que querían ir: tres de sus hijas mujeres fueron comunistas, se casaron con judíos y trabajaron secretamente para el Komintern; dos de sus hijos varones participaron en la conspiración para matar a Hitler en 1944, uno de ellos logró salvarse porque el lugar donde iba a ocurrir el atentado era en la misma casa donde había tenido lugar aquella reunión de Hitler con los generales, cuando era la casa de los Hammerstein (el joven Ludwig logró escabullirse por los sótanos que había aprendido a conocer al milímetro durante su niñez en esa casa). Esa casa, que pertenecía al Ministerio de Defensa, fue convertida años más tarde en el Centro Conmemorativo de la Resistencia durante el Nazismo. El director de ese Centro, hasta hace muy poco, era Ludwig. El y todos sus hermanos sobrevivieron a la guerra. La madre también había sobrevivido. Sólo Hammerstein murió. Todos los hermanos, incluso la madre, a su particular manera, colaboraron en la resistencia contra Hitler, una vez que Hammerstein murió. En su gran libro sobre Hammerstein, Hans Magnus Enzensberger le pregunta a Ludwig si todos ellos actuaron así por su padre, o porque él no actuó. Ludwig lo mira con los mismos ojos insondables de su progenitor y le contesta: 'En una familia como la nuestra, de esas cosas no se habla'”.



Fuente: Página 12 Hammerstein el invisible, artículo de Juan Forn 



Esteban Cámara

lunes, 16 de septiembre de 2013

1955, 16, septiembre

El 16 de septiembre de 1955 se produjo un golpe de estado contra un gobierno popular, democrático y progresista de la Argentina, encabezado por Juan Domingo Perón. Con gran alborozo de los medios de comunicación de la oligarquía (particularmente Clarín y La Nación) a esa dictadura la quisieron llamar "Revolución Libertadora". Fue todo lo contrario, volviendo a encadenar al país al carro de las potencias mundiales y a los trabajadores quitarles derechos, conquistas y dignidades y a la gente más humilde quitarles la imprescindible ayuda del estado que repara lo que la falsa "libertad de mercado" les roba en cada interacción asimétrica (política, mercantil, judicial o laboral).

El sentido social de la gestión peronista fue la inclusión social y la asignación explícita de derechos a los sectores más postergados de la economía y la sociedad. El modelo económico fue de Industrialización por Sustitución de Importaciones, el cual llevó el país al pleno empleo. En la salud, la gestión del Ministro Ramón Carrillo se orientó hacia la medicina social, la atención primaria de la salud y el desarrollo propio de fármacos. La ayuda social se incrementó considerablemente orientándose hacia la promoción social. Las leyes laborales produjeron un vuelco en la situación laboral de los asalariados y la sindicalización alcanzó niveles superlativos. El sentido general del gobierno peronista fue socializante, progresista e inclusivo, aún a despecho de ciertos aliados y antecedentes del propio Juan Domingo Perón.

Una de las principales moldeadoras del ideario peronista fue la propia Eva Duarte de Perón, figura de enorme sentimiento proletario y cuya lucha inclaudicable siempre se orientó hacia los más necesitados. Lamentablemente Evita falleció de cáncer en 1952 con poco más de treinta años.

Pocas semanas antes de la asonada militar se había producido uno de los acontecimientos más horrorosos de la política argentina cuando aviones de la marina bombardearon Plaza de Mayo produciendo centenares de transeúntes muertos, muchos de ellos criaturas que apenas asomaban a la vida.

En primer lugar asumió la presidencia el General Lonardi, pero su figura fue vista como demasiado suave por el "círculo rojo" (los ideólogos del establishment) para con los peronistas y 
fue reemplazado por Pedro Eugenio Aramburu. La represión a las figuras del peronismo fue despiadada, con fusilamientos, torturas y desapariciones, embrión del accionar de la dictadura de Videla a la que precedió en dos décadas.

Se anuló la Constitución de 1949 y con ella numerosas conquistas sociales y mecanismos de intervención del estado en la economía y el retroceso social llevó a la economía a un estancamiento y a los grupos más vulnerables al desempleo y la miseria. La política social y laboral fue desarticulada paulatinamente.

El 16 de septiembre siempre parece ser nefasto en nuestras latitudes. Dos décadas después vendría la masacre de la noche de los lápices, (hay nota en este mismo blog) y unos años antes de ésta, el cobarde martirologio y asesinato de Víctor Jara en Chile (nota en este blog).



Esteban Cámara
Santa Fe, 16 de septiembre de 2013

sábado, 14 de septiembre de 2013

Diagnósticos e ideología: Inflación

Originalmente publicado en Facebook el 27 de octubre de 2011 a la(s) 12:51. Sigue siendo actual.

Hay una determinante obvia: el diagnóstico que se hace de un problema y sus causas depende del sistema de ideas que ostenta el diagnosticador.

Si nos referimos a la economía argentina, ciertos sectores hacen eje en la inflación como problema fundacional de la economía.

La inflación argentina implica cerca de un 15% anual si tomamos un conjunto de precios de bienes y servicios en series a largo plazo. Estos niveles están lejos de la hiperinflación, la que se define como una inflación con tendencia al desequilibrio, a la aceleración. Uno de los primeros estudiosos de la hiperinflación, Phillip Cagan, la definió como una inflación superior al 50% MENSUAL.

Un dato importante de la inflación es que cualquier proceso de drástica expansión del producto bruto (crecimiento) está indisolublemente ligado a inflación moderada.

A su vez, Joseph Stiglitz (Premio Nobel de Economía 2001) explicaba recientemente que frecuentemente el alto nivel de los precios de las commodities (por ejemplo, carne, leche, soja y otros granos) origina inflación “importada” en los países productores.

Por todas estas razones creemos que la inflación argentina no es un problema que deba centralizarse.

Pero el principal problema de exacerbar la problematización de una inflación leve o moderada es que las recetas para abordarla son claramente recesivas y pasan por el “enfriamiento de la economía” y el ajuste. Estas medidas, tales como devaluación de la moneda, ajuste fiscal, baja de salarios, apertura de la economía, endeudamiento externo, entre otras, y que son reclamadas por los políticos de matriz neoliberal, es obvio que van a significar desocupación y miseria. Ya vivimos un ciclo como ése en la convertibilidad que desembocó en una recesión nunca antes vista con tasas de pobreza del orden del 60% y desocupación lindante con el 30%.

Tampoco han sido eficaces en nuestro país las políticas de otro cuño como el control de precios y los acuerdos con sectores empresarios.

No pretendo en este escrito, como seguramente van a querer leer algunos, expresar que la inflación no es un problema. Sólo quiero advertir sobre las intenciones e ideología de aquellos que exageran su problematización.

No nos equivoquemos, los exégetas de la lucha contra la inflación provienen inequívocamente del neoliberalismo (más allá de que se digan progresistas) y pretenden llevarnos por caminos que ya nos han conducido al fracaso, las crisis profundas, los saqueos, la desocupación y la miseria.



Esteban Cámara

Por qué vamos a seguir jodiendo con los ‘70

Originalmente publicado en Facebook el 23 de diciembre de 2010 a la(s) 5:31, en respuesta al alegato fascistoide de una pluma mercenaria.


No sólo porque nos jodieron la vida los milicos.

No sólo porque desaparecieron, mataron, encarcelaron y torturaron a nuestros compañeros.

No sólo porque nos persiguieron, censuraron, mintieron, reprimieron y amenazaron.

No sólo porque, no contentos con asesinar a nuestros compañeros, les robaron la identidad a sus hijos y todavía andan abuelas buscando a sus nietos perdidos.

No sólo porque no queremos que las bestias asesinas se sigan paseando impunemente por la calle, con nuestros hermanos, hijos y madres al alcance.

No sólo porque se robaron empresas y aplicaron un plan económico criminal que dejó en la calle a cientos de miles. Y encima octuplicaron la deuda externa.

No sólo porque hubo otros 70.000 jóvenes víctimas del gatillo fácil ya en democracia, en su mayor parte debido a las prácticas y la mano de obra impune que quedó y tal vez queda en los organismos de seguridad.


Además de todo esto, vamos a seguir jodiendo con los ’70 porque no queremos que a nuestros hijos los amenace una picana o una tumba perdida si se les llega a ocurrir interesarse activamente por el futuro de sus semejantes.




Esteban Cámara

miércoles, 11 de septiembre de 2013

Salvador


Disculpen, probablemente ya los moleste con esto, pero para mí es importante: Yo empecé a militar con Allende vivo y en el gobierno de su Chile, en aquel 1973. Era mi ídolo, yo anhelaba fervientemente que fuera cierto ese camino pacífico al socialismo. Yo estaba en el FIP de Jorge Abelardo Ramos, izquierda nacional y popular de raigambre bolivariana y afín al peronismo.

Perdonen si canso con este tema. Ya sé que publiqué algo así el año pasado. 

Pero aquel 11 de diciembre de 1973 al volver de la escuela, a mis doce inocentes añitos de primero de secundaria y militante novel, mamá me contó que habían asesinado a Salvador. Yo lloré esa siesta un llanto amargo y callado, nadie lo supo, sólo yo. Hasta el año pasado. 

Un día como hoy, hace cuarenta años, mataban a Salvador Allende en Chile. Que no me vengan con la gilada de que se suicidó. Al golpe lo dieron directamente desde la embajada yanqui, luego de más de una década de conspiraciones y financiamiento a los grupos de derecha, con la complicidad de la pequeño burguesía pelotuda. Hasta al jefe del ejército asesinaron los sicarios yanquis. Nunca me voy a olvidar de las viejas chotas de los barrios ricos de santiago caceroleando, pidiendo el golpe, defendiendo a los intereses estadounidenses. ¿Les recuerda a algo? a mí sí. También en aquel momento la extrema izquierda se sumó al complot, esos eternos adolescentes tan necesarios al imperialismo, esos "pibes troskos" de edad mental (¡y política!) de quince años y edad física de 30-40-50-60- etc. ¿Les recuerda a algo? Hoy en Argentina dos políticos opositores denuncian un golpe en ciernes contra un gobierno que sigue el camino de Allende, más lento tal vez. Yo vengo diciendo lo mismo desde hace años, ignorando las miradas burlonas y las alusiones de exageración.

"Hemos suprimido la lucha de clases" dijo Pinochet. Y habìa matado a miles, inclusive al trovador de voz tierna, a Víctor Jara.

Y... así estamos en latinoamérica. El neoliberalismo nos pasó por arriba a todos. Algunos estamos empezando a repechar, otros siguen profundizando el abismo de clases. La batalla cultural es ardua en todos nuestros países (inclusive en Cuba): El individualismo, el esto es mío y el que se jode se jode, sigue erosionando la trama social. Mucha gente ha perdido su consciencia social. Y mientras el individualismo siga siendo el punto de mira del  pensar de nuestras clases medias ( y de algunos otros desorientados-desclasados), difícilmente podamos evolucionar hacia formas justas de convivencia.

Si te parece extraño que escriba tanto sobre Cuba y Chile siendo Argentino cometés un sólo error: Nací en Argentina, pero mi ideología, y mi corazón, es de la Patria Grande. Soy Patriagrandense, nativo y por opción.

Nunca más un golpe en latinoamérica. 



Lecturas necesarias:

El Chile de hace cuarenta años y el de hoy. Nota en Página 12, de Miguel Rojas.

El día que todo cambió, en Página 12, nota de Ariel Dorfman.

Hasta el Cóndor lloró, en Página 12, nota de Mercedes López San Miguel.

Victoria y desestabilización, en Página 12, nota de Atilio Borón.

Combatir hasta la muerte, en Página 12, de Oscar R. González

Allende, el cambio y la codicia, en Página 12, de Martín Granovski.


Dedicado a Salvador Allende, Víctor Jara, Claudio Jimeno y miles más.


Esteban Cámara.


lunes, 9 de septiembre de 2013

Memorias del subdesarrollo (mental)

Santa Fe, Argentina, fines de abril del año 2003

Una monstruosa inundación causada por lluvias infrecuentes causa el anegamiento de cerca de un tercio de esa ciudad de casi 500.000 habitantes. Hubo 150.000 evacuados y cerca de 30 muertos. Se crearon unos 500 centros de evacuados en escuelas, galpones abandonados, instalaciones municipales, parques y plazas de la ciudad y también muchos autoevacuados, que se refugiaron en casas de parientes no afectados por el fenómeno.



No voy a hablar aquí de las causas de la inundación porque ya lo hice en otros artículos de este mismo blog. Voy a hablar del subdesarrollo mental de ciertos funcionarios.



El día 29 de abril, siendo Director de Bioquímica y Farmacia de la Provincia de Santa Fe y ya al tanto del desastre recibo el llamado de mi superior, el Subsecretario de Salud. Quería que le lleve al denominado Comité de Crisis tres de los botiquines de medicamentos de emergencia que habíamos empezado a armar para la ocasión y que estaba previsto que se envíen a los centros de evacuados para la atención de salud de sus refugiados. La semana anterior habíamos diseñado con el personal de la Dirección un botiquín para aproximadamente 300 consultas, considerando las más frecuentes enfermedades a atender en una inundación. El viernes anterior habíamos empezado a armar algunas de las cajas con esa composición y las habíamos enviado a una localidad al norte que ya se había inundado. El lunes y, sobre todo, el martes habíamos estado trabajando a full con la preparación de más y más cajas de medicamentos. La ciudad, mientras tanto, se inundaba.



Le pregunto al funcionario (entonces viceministro de salud) con qué auto llevar los botiquines y me dice, cortante, que los lleve en el mío. Bueno, si bien no soy muy manso que digamos me voy para el comité de crisis haciendo acopio de toda la buena voluntad posible atendiendo al sufrimiento de mis conciudadanos. Ya era de noche y tuve que navegar con mi viejo Renault por las calles anegadas. Fue un milagro que no me dejara por el camino (exhalaría su 'último aliento' unos años después). Al llegar al comité de crisis en el centro de la ciudad (en el Ministerio de la Producción), lo primero que veo es a tres autos del Ministerio de Salud en la puerta (junto a otros muchos de otras reparticiones). En el primer piso, cómodamente sentados, departiendo amablemente, varios choferes de mi ministerio se aburrían frente a sus tazas de café. Me acerco a las oficinas del Ministro de la Producción y encuentro a mi superior, muy de trajecito y corbata tomando café, cómodamente apoltronado. Le entrego los botiquines pensando que eran para algún centro de evacuados y me doy cuenta de que era al sólo efecto de hacerse ver frente a los medios de comunicación y los otros funcionarios que allí estaban presentes. Arriesgué mi auto y hasta mi integridad física para que semejante inepto se hiciera publicidad. Y mientras yo pasaba nervios preguntándome si mi viejo auto iba a sobrellevar esas enormes lagunas urbanas, funcionario y choferes tomaban café tranquilamente, relajados.



Con el correr de los días prácticamente me quedé a vivir en mi despacho. Comía y dormía ahí, días hábiles, sábados, domingos y feriados. Iba a mi casa solamente a bañarme. Ese primer mes dormí solamente tres días en mi casa. Con el Jefe Zonal de Salud, Juan Carlos Sánchez y nuestros respectivos colaboradores vivimos en aquellas oficinas, nosotros en planta baja y ellos en el subsuelo. Nos encontrábamos de madrugada a veces, ojerosos y estresados, para resolver algún problema mientras nuestro jefe en común tomaba café en el comité de crisis (de saco y corbata) o, más probablemente, descansaba tranquilo en su camita. Nunca, jamás, pasó por nuestras oficinas, ni siquiera en los meses más álgidos. Ni que tuviéramos la peste.



De resultas de tanto estrés, agotamiento y falta de descanso perdí gran parte de mi memoria y capacidad de concentración durante varios años.



Finalizada la emergencia, luego de 4 meses de agotamiento ajeno, el tomador de café nos pidió a ambos un informe de lo actuado. Lo hicimos. Con esos informes el Doctor Tardivo, de saco y corbata, se fue a México a presentar nuestro trabajo durante las inundaciones.



A fines de ese año cambió el gobierno. El tomador de café siguió desparramando ineptitud y estolidez en su anterior cargo. Eso sí, siempre de saco y corbata.



Tanto Juan Carlos Sánchez como yo fuimos relevados de nuestros cargos. Al menos yo (supongo que también aquel compañero de desvelos, pero no me consta) recibí un diploma del anterior gobernador en reconocimiento de lo actuado. 






Esteban Cámara
Santa Fe, 09 de septiembre de 2013

miércoles, 4 de septiembre de 2013

Millones de cintas amarillas

Este 12 de septiembre en Cuba florecerán millones de cintas amarillas pidiendo la libertad de los cubanos antiterroristas condenados en proceso absolutamente injusto (así definido por Amnesty International) y absurdo.

Hoy quedan cuatro de ellos en prisión, algunos con sucesivas cadenas perpetuas, porque osaron intentar desbaratar nuevos atentados de grupos terroristas anticubanos que actuaron bajo el amparo de la CIA y la NSA del país más terrorista de la historia: EEUU.
La organización Amnistía Internacional declaró que "durante el juicio no se presentó ninguna prueba que demostrase que los acusados realmente hubieran manejado o transmitido información clasificada". Además, la organización denunció que los acusados "tuvieron un acceso limitado a sus abogados y a documentación, lo que podría haber menoscabado su derecho a la defensa". Fueron acusados de espiar instalaciones gubernamentales militares pero declinaron presentar las pruebas porque las declararon "secretas"...

Además fueron juzgados en la localidad con mayor concentración de enemigos de la revolución cubana de EEUU y bajo una intensa campaña de hostilidades de la prensa oligárquica y anticubana, demostradamente financiada por los grupos anticastristas.

Los cubanos injustamente detenidos se llaman Antonio Guerrero Rodríguez, (sentenciado a 22 años de prisión), Fernando González Llort (sentenciado a 18 años de prisión), Gerardo Hernández Nordelo (sentenciado a dos cadenas perpetuas más 15 años de prisión), Ramón Labañino Salazar, (sentenciado a 30 años de prisión) y René González Sehwerert, ya liberado en Cuba, originalmente condenado a 15 años de prisión. 
Uno de los atentados, realizados por el agente de la Cía Posada Carriles le costó la vida a decenas de inocentes al hacer estallar en vuelo un avión de Cubana de aviación. Otro de esos atentados consistió en acribillar desde una avioneta el malecón de La Habana con el saldo de turistas italianos muertos. Esa es la calaña de acciones que los detenidos intentaron evitar.

Del blog Ala y Raíz
CintaAmarilla1
Necesito una o cien cintas amarillas…las que pueda encontrar. Ya busqué pero no tengo y las preciso con urgencia. Una la anudaré en mi pelo, otra para un lazo en cuello, también para atar en mi cintura, adornar la fachada de mi casa, el jardín y hasta los árboles de la avenida, ahh… además para regalar a las personas que quiero.
Urjo de cintas amarillas, porque este 12 de septiembre mi país se pintará del color del sol y yo no quiero ser la excepción ¿Me ayudas?
Con mis cintas quiero que todos sepan que también esta cubana exige justicia para Ramón, Fernando, Gerardo y Antonio y que espero que vuelvan pronto a casa con su familia.
Desde hoy colgaré un anuncio en mi pecho que diga “Se buscan cintas amarillas” y debajo con letras grandes OBAMA GIVE ME FIVE.
Necesito una cinta amarilla… ¿me ayudas?
Autora: leniacuba

¡Libertad para los cinco!

Fuente: Wikipedia y medios de prensa y blogs de Cuba.


Esteban Cámara








lunes, 2 de septiembre de 2013

Ezequiel

[Originalmente publicada como nota en Facebook en noviembre de 2010] 

La muerte de Ezequiel Ferreyra (6 años, asesinado por el trabajo esclavo, los agrotóxicos y el cáncer que le produjeron) nos deja abrumados y sin palabras a todos. Falleció un 17 de noviembre de 2010.

(Fuente Kaos en la red)

No puede ser. No se puede tolerar.

Ezequiel iba a ser el próximo Messi.

¿Adónde estaba el inspector de trabajo? ¿Para dónde estaba mirando? ¿Y su jefe? ¿Y el funcionario político-ministro a cargo? ¿Adónde estaba el estado que no lo defendió?

La empresa avícola que lo asesinó se llama Nuestra Huella y su responsable se llama Alejandra López Camelo. ¿Por qué los periodistas no nos muestran su cara? ¿Para cuándo el escrache? ¿Vamos a seguir consumiendo los medios que no nos muestran su cara, que no la muestran como la lacra que es?

¿Cuantos Ezequiel están todavía esclavizados, envenenados y agonizando por allí?

Ezequiel iba a descubrir la cura para el cáncer.

Hace muchos años un señor que sentía este problema como pocos, Miguel Hernández, escribió un poema llamado Niño Yuntero. 

Transcribo un fragmento:

¿Quien salvará a este chiquillo
menor de un grano de avena?
¿De donde saldrá el martillo
verdugo de su cadena?

Que salga del corazón
de los hombres jornaleros.
Que antes de ser hombres son,
y han sido, niños yunteros.

Y eso nos lleva al sindicato, a Uatre y a Venegas… Estamos al horno. No sirven. Están en otra, demasiado ocupados en arrodillarse ante las braguetas abiertas de la Sociedad Rural.

Ezequiel iba a descubrir la inmunización contra el sida.

No podemos dejarlo así y seguir con nuestras vidas. Hay que abandonar el individualismo, el trabajar nada más que por uno mismo, por nuestros bienes, nuestra casa y nuestra familia.

¿Por qué? Porque mientras tanto se nos mueren los ezequieles de este mundo. Y tenía sólo seis años.

Y no me vengas con la excusa cobarde de que “los políticos son todos una mierda”. Están ahí porque alguien los votó y porque VOS les dejaste el camino libre, con tu inacción y desinterés.

En estos últimos meses me dí cuenta de cuán equivocado estaba el eslogan de 2001: “Que se vayan todos”. Es suicida, es vacuo. Si se van todos ¿quién queda? Un milico, un cura, un empresario, la monarquía, o alguien parecido. El asunto no es que se vaya nadie sino que TODOS nos metamos en la discusión, en la militancia, en las marchas, en la negociación, en la difusión, en el consenso o en la pelea (tengamos muy en cuenta no siempre va a haber consenso: esa idea es peligrosa y limitante).

Ezequiel y toda criatura que se nos muere absurdamente podría ser todo lo que nos imaginemos porque cada niño es la pura potencialidad. Cada pibe que nos falte es un hueco que le hacen al futuro. No los dejemos morir así. No los ignoremos.





Esteban Cámara
Santa Fe, 26 de agosto de 2013